Cuando abría,
era a tí, a quien buscaba
oteaba a lo lejos adivinando tu presencia,
una y otra vez se asomaban mis anhelos,
en busca tuya, ¡en busca tuya mi amor!
Mi corazón acelaraba sus latidos
cuando asomabas a la esquina,
alzabas la mirada
y era mí, a quien buscabas.
Reíamos felices,
y parabas un momento
antes de abrir la reja de tu casa.
cruzabamos miradas,
sintiéndonos llenos de amor
a la espera anhelada de los dos.
Cerrabas la reja,
yo mi ventana y,
pensaba de antemano,
en nuestro próximo encuentro;
Nuestro ojos de nuevo
cruzando sus miradas
a lo lejos mi amor, ¡a lo lejos!
Siempre recuerdo esos pocos pasos,
en que cruzabas la esquina y
tus ojos, buscaban los míos;
se alzaban buscando mi ventana,
nuestra ventana mi amor,
esa ventana,
que ya no está.
Por Yolanda López Arciniegas